Sin miedo puedo decir que esta es la mejor receta de alioli vegano que he probado.
No pica, no repite, no te queda regustillo raro a ajo durante horas ni te apesta el aliento… ¡Y además es sabroso, delicioso y cremosísimo! Os enseño cómo se hace…
INGREDIENTES
- 200ml de leche de soja
- 1 cabeza de ajo (sí, entera)
- 400-600ml de aceite de girasol
- 1 chorrito de aceite de oliva
- 2 cditas de vinagre o zumo de limón
- 1 cdita de mostaza (opcional pero recomendada)
- Sal, pimienta y hierbas secas
INSTRUCCIONES
- Pela todos los ajos y ponlos en aceite en una olla pequeña para hacer ajo confitado (¡es muy fácil y sirve para un montón de cosas deliciosas!). Una vez listo, deja enfriar y procede con la receta.
- En un vaso alto, echa la leche de soja, vinagre y mostaza. Empieza a batir con la batidora de mano sin moverla demasiado, mientras echas un hilo del aceite de ajo, despacito pero sin parar.
- Una vez emulsionado, echa el ajo confitado junto una pizca de sal, pimienta y hierbas secas y sigue batiendo hasta conseguir la textura deseada. ¡Listo!
Si te gusta con trocitos, puedes simplemente machacar el ajo y añadirlo al final, sin batirlo.
Este alioli casero sorprende a cualquiera, es increíblemente cremoso y mucho más sabroso que una ajonesa con ajo crudo. ¡Espero que te guste! Yo me lo comí en este bocata hecho con mi receta de seitán, tomate y rúcula. Estaba para chuparse los dedos.